Publicado en suplemento X, de La Voz del Interior. 24 de octubre de 2013.
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NOTA COMPLETA:
Por Emanuel
Rodríguez
“Empezamos a festejar 15 años compartiendo poesía como pan”,
dice la invitación al inicio de un ciclo de lecturas de poesía que
será la celebración de la década y media de vida que lleva el
sello independiente Pan Comido, un colectivo formado por Juan
Stahli, Ceferino Lisboa, Andrés Rubino, Fernando Bellino, Alexis
Comamala y Pablo Carrizo. El viernes 8 de noviembre, el grupo que
formó un sello independiente y que publicó a gran parte de la
escena contemporánea cordobesa, celebrará sus 15 años de vida con
una lectura de poemas a cargo de Alejandro Schmidt, Eugenia Cabral,
Camila Garcia Reyna, Liliana Lukin, Osvaldo Guevara, María Teresa
Andruetto, Marcio Olmedo y Elena Anníbali. El poeta Fernando Bellino
le cuenta a Ciudad X cómo hicieron los Pan Comido
para sobrevivir a la poesía.
–¿Qué recordás del inicio de Pan Comido?
–La energía colectiva, el convencimiento y la duda, la lenta
construcción de la mirada propia articulándose con otros y otras.
En aquel tiempo, bebidas como la ginebra y el whisky. Los encuentros
con otros artistas, las primeras plaquetas con poemas y dibujitos...
–¿Qué dirías que cambió mucho desde los comienzos de la editorial?
–Pan Comido es sobre todo un grupo de poetas devenidos editores,
diría, por inclinación natural. Siempre difundimos la poesía que
todos los integrantes producimos e invitamos a muchísimos otros
poetas: compañeros de generación, gente que recién está
comenzando a forjar su palabra, poetas de mayor recorrido y abuelos
poetas también. Lo que cambió es mucho, empezando por el país.
–¿Cuál fue el proyecto editorial que más trabajo les dio?
–Ummm, bueno, un ejemplo es la antología Mientras
crece, lista y diseñada hace unos cinco años y aún sigue
siendo un archivo de Corel, parte de una trilogía junto con Belleza
obliga y Derrota no. Pero la verdad es que
a cada pequeño material que hacemos lo disfrutamos y le ponemos el
mismo empeño.
–¿Qué objetivos cumplieron y qué objetivos no cumplieron en estos 15 años?
–Mientras sigamos reuniéndonos y haciendo, seguiremos
cumpliendo los objetivos. Como dijo Arlt: el mundo es nuestro por
prepotencia de trabajo.
–¿Cuál es el principal capital de Pan Comido?
–Ser un colectivo hecho de amistad, pasión y convencimiento en
la palabra y los cuerpos implicados con ella.
–¿Qué consejo le darías a un editor principiante?
–Que no se aisle, que contagie y se contagie, que confíe y
actúe y corrija y así...
–¿Cómo sería Córdoba sin Pan Comido?
–Sería una ciudad más aburrida y menos sensible.
–¿Cómo sería Pan Comido sin Córdoba?
–Bueno, si bien yo me siento cordobés, nací y me crié hasta
los 15 años en Buenos Aires. Por eso arriesgo que sería lo mismo
pero en otro lugar distinto y en diálogo con ese hipotético lugar.
Esto no anula que nos sentimos parte de una identidad cordobesa y así
solemos firmar nuestras ediciones: “poesía cordobesa”.
–¿Qué hay en el futuro inmediato del grupo?
–Estamos prontos a editar los números 7 y 8 de nuestra
colección “Música del Lugar”, esto con nuestros aliados y
compañeros de la Editorial Gráfica 29 de Mayo: dos tremendos libros
de Alejandro
Schmidt y Liliana Lukin. Además de seguir pensando la
continuidad del ciclo “Habitar
el Grito” junto con la gente del lugar de memoria La Perla. Hay
ganas de lanzar para 2014 una nueva colección de libros, pero falta.
Festejo. El viernes 8 de noviembre a las 19 comenzarán los festejos por los 15 años de Pan Comido. Alejandro Schmidt, Eugenia Cabral, Camila García Reyna, Liliana Lukin, Osvaldo Guevara, María Teresa Andruetto, Marcio Olmedo y Elena Anníbali leerán sus poemas. Habrá brindis y música. La cita es en el subsuelo del Centro Cultural Néstor Kirchner (Radio Nacional Córdoba, Santa Rosa esquina General Paz).
El grupo de poetas Pan Comido comenzó a trabajar en 1997. Han
editado las antologías: Belleza Obliga (2004),
Derrota No (2005) y El día más parecido
(2008). Y las plaquetas colectivas Maquinita de poesía
y Poemas como se puedan editar. Y en la colección
Música del Lugar, los libros La vida que se conoce
de Ceferino Lisboa (2009), Crías nuevas de Fernando
Bellino (2011), Hablar lo suficiente, trabajar lo necesario
de Juan M. Stahli y La selva oscura de Leticia
Ressia (2012). En abril de 2013 editaron la plaqueta Con mi
sangre escribiré un poema. El grupo está integrado por
Juan Stahli, Ceferino Lisboa, Andrés Rubino, Fernando Bellino,
Alexis Comamala y Pablo Carrizo.
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Fe de errata: el colectivo Pan Comido tambien esta integrado por Fabricio Devalis y Sebastian Cantoni
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